¡Buen viaje Bogotá rural!

En esta oportunidad, los editores queremos despedirnos diciendo algunas palabras. 

Gracias por permitirnos hacer este pequeño viaje por Sumapaz juntos, esperamos seguir viendo como crece nuestra Bogotá rural.

Con la participación de...

María Alejandra Ocampo Díaz.

Trabajo Social.

Vivo en una zona rural del municipio de Zipaquirá. He crecido rodeada de labores como la ganadería y la agricultura, y mi familia casi siempre se ha movido laboralmente en estos medios. Considero que el tema de Bogotá Rural y municipios aledaños es importante de conocer debido a que las personas campesinas con su labor sostienen a todo el país. En Bogotá la población de la localidad de Sumapaz es fundamental para la sostenibilidad del distrito, su labor es tan importante pero tan poco tenida en cuenta por los habitantes de la ciudad. 
Nuestra labor como línea y como científicos sociales es darle la visibilidad que esta labor merece. Queremos mostrar a una Sumapaz conformada por personas trabajadoras y necesarias para la economía y el sustento de Bogotá. Hay que dejar de ver a la localidad como un lugar turístico en el que, además, se ve afectado el ecosistema y las especies endémicas. Tenemos que comenzar a valorar la labor de estas personas que son una base fundamental para el país, porque sin ellas no seríamos nada.

Jennifer Andrea López Aragón
Trabajadora Social en formación
Bogotá rural y municipios aledaños es un tema bastante complejo de manejar, además de ser una coyuntura impactante, pues a lo largo de los años hemos visto como es invisibilizado por los gobiernos y la población bogotana, sin mencionar la magnitud de concepciones caritativas y despectivas ante sus pobladores, que dejan de ver estos territorios por lo que son y comienzan a verlos por lo que pueden dar; sin embargo, en Sumapaz aun teniendo en cuenta  la gran cantidad de recursos hídricos, fauna y especies endémicas, se nota el gran interés por explotar y extraer todo aquello que cubra una necesidad de la población a partir de los recursos naturales, pues en él se centra todo lo que es turismo y economía, y como interfieren en la vida campesina y sus dinámicas sociales, pero ¿cómo incentivar un turismo que no interfiera e impacte en la sostenibilidad del páramo?
Ahora es necesario comenzar a incentivar una economía que no interfiera en los procesos naturales del páramo, incentivar más políticas que en verdad aboguen por el bienestar de la población, inclusive manejar procesos de visibilidad para comenzar a cambiar concepciones a cerca de lo que es la vida campesina y los recursos naturales en Sumapaz.

Karen Natalia García Borray
Psicología

!Sí¡ Bogotá tiene zonas rurales, zonas que la urbe suele invisibilizar con su gran comercio, pero que no suele identificar que muchas de esas dinámicas comerciales son gracias a la sostenibilidad de territorios como Sumapaz, territorios rurales y campesinos. La concepción de una ruralidad sostenible suele caer en la romantización de los contextos sociales que se viven en las poblaciones, pues tras la jerarquización de las economías, nos han enseñado a ver a al campo y las zonas rurales como aquellos que valientemente luchan por estar a la altura de las dinámicas urbanas, la realidad es que a pesar de que los contextos obliguen a los territorios a ir de la mano que las ciudades, lo rural siempre defenderá su ser y su existencia, y los límites que se pongan entre urbanidad y ruralidad, no son sinónimo de la valentia de sus pobladores y el esfuerzo que hacen por ir en la línea del desarrollo, sino un ejemplo de lo injusto, cruel y negativo, que puede resultar el privilegio. El gran ejemplo de esto es lo que quisimos mostrar aquí, lo que hay detrás del turismo, pues no solo puede verse la parte en la que todos ganamos; pues unos conocemos y otros sostenemos la economía del territorio, sino que es en estos mismos territorios, donde a veces, los que menos quieren este tipo de economías son los habitantes, pues sus vidas se basan en otras dinámicas más agrícolas, dinámicas que aprendieron a amar con el paso de sus generaciones, y dinámicas que no les pueden ser arrebatadas por ir en busca de aumentar una economía nacional. La ruralidad debe ir siempre en nuestro interior, recordar de dónde venimos, pues la gran mayoría de nosotros tiene abuelos que son del campo, y son ellos los que realmente nos enseñan a amar y defender la tierra, algo que no podemos permitirnos olvidar.

Francisco Alfonso Lopez Buitrago
Historia
En el contexto actual que vive la ciudad no podemos dejar de lado la ruralidad con todos sus matices, el campesinado es aquel ente invisible que brinda alimento y sustento a las grandes ciudades y hoy más que nunca está siendo olvidado por una ciudad egoísta e individualista.
Como científicos sociales tenemos el deber de visibilizar esta población, en este caso los campesinos del Sumapaz y OJO, no estoy diciendo que hay que proteger como si de niños pequeños se tratase, estoy diciendo que a través de las nuevas herramientas aprendidas podemos darle la visibilidad a la fuerza, valentía y entusiasmo que caracteriza a esta población, tenemos que dejar de ver a él Sumapaz netamente como una zona turística sin ningún otro valor, tenemos que entender que más allá de nuestras costumbres citadinas existen otras formas de vida igual de validas y a su vez aprende de ellas, como siempre digo, tenemos que ayudarnos entre nosotros porque si no estamos jodidos.

!GRACIAS TOTALES¡