UN CAMINO DE BUENAS INTENCIONES, PERO DE POCAS ACCIONES.

Tomado de: www.bogota.gov.co
Las noticias nos muestran una posición generalizada de los diferentes estamentos de la sociedad que reconocen la importancia de las zonas rurales, buscando rescatarlas y reconociendo que cuando se trata de la zona periférica de la ciudad de Bogotá, las mismas se han convertido en foco de inseguridad, debido al abandono al que se han visto condenadas desde hace tiempo.
Sin embargo, no obstante la preocupación creciente que se evidencia en época electoral, se observa que de todas maneras el campesino siempre pasa en nuestro medio a un segundo lugar. Por ejemplo, en la localidad de Chapinero se celebra el día del campesino el 12 de Septiembre, olvidando que su fecha de celebración es el primer Domingo del mes de Junio, como se estableció en el Gobierno de Guillermo León Valencia, mediante Decreto 135 de Febrero 2 de 1965. Con el establecimiento de dicha fecha se buscaba rendir homenaje al Campesino Colombiano por su trabajo abnegado para plantar semillas, cuidar plantas y animales y cosechar frutos para alimentarse y alimentar a otros. Un objetivo con espíritu de reforma agraria, pero que ahora ha quedado en el vacío cuando lo que se pretende es utilizar la figura del campesino como estandarte de campaña.

Después de dejar en nuestra conciencia un temor por la inseguridad de la zona rural o la propuesta de un político que argumenta defender los humedales, pasamos al cotidiano ajetreo de la ciudad que vuelve a esconder en lo más profundo del inconsciente colectivo la importancia de la zona rural.


Al año siguiente, celebraremos el día del campesino, si es que nos queda tiempo,  cuando nos quede un espacio en la agenda apretada de la ciudad; pues ya no hay espacio para que sea el primer Domingo del mes de Junio, como lo consagra la ley. Para el citadino más importante que celebrar el día del campesino es no perderse el 16 de Julio de cada año para desfilar con vehículos ataviados de imágenes y bombas blancas y azules para celebrar el día de la Virgen del Carmen.
Eso nos muestra que nuestra conciencia ecológica no deja de ser cosa diferente a una expectativa o un camino lleno de buenas intenciones, pero de pocas acciones. Debemos volver no sólo los ojos a las zonas rurales, sino también nuestras políticas y nuestras acciones. No debemos relegar al campesino. Debemos respetarlo porque es la fuerza que mantiene la zona rural. Mientras se haga alarde de la defensa de la zona rural sin pensar en el campesino, no estamos haciendo nada diferente a un discurso retórico sin solución alguna a los problemas que nos aquejan. La inseguridad de la zona rural, sólo acaba en la medida en que se le dé al campesino la importancia que merece. Y el discurso del político, sólo tendrá eco si parte de la figura del campesino en la creación y ejecución de leyes. Una zona rural sin campesino, no deja de ser cosa distinta a un bonito lugar para descansar, pero que no tiene importancia para nosotros cuando nos perdemos en el estrés de la ciudad.   
  
Fuentes.
Alcaldía local de Chapinero- “Chapinero se prepara para celebrar el dia del campesino” Recuperado de:http://www.chapinero.gov.co/index.php/i-ni-cio/354-chapinero-se-prepara-para-celebrar-el-dia-del-campesino. Fecha de consulta: 10.09.2015
El tiempo, “Las 5 propuestas de Carlos V. de Roux en su carrera por la Alcaldía” Recuperado de: http://www.eltiempo.com/bogota/elecciones-alcaldia-de-bogota-propuestas-carlos-v-de-roux/16326475 Fecha de consulta: 10-09-2015


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