TERRITORIO RURAL: CONSTRUCCIÓN DE CULTURA Y CONCIENCIA



Proveniente de Science progress
http://scienceprogress.org/2011/08/rural-innovation-and-entrepreneurship/
En Bogotá los ciudadanos estamos acostumbrados a abrir la llave y que por ella salga agua. Naturalizamos tanto esta situación que no podemos imaginar que otras personas de otros sectores de la ciudad, no puedan disfrutar de este derecho, pero la realidad es otra, en las localidades donde existe gran extensión de área rural, por ejemplo la localidad de Sumapaz, territorio completamente rural, la localidad de Usme, y las demás localidades con espacio rural no se les garantizan estos derechos.
Por otra parte la administración local de Usaquén muestra un claro interés por el desarrollo de esta localidad, adelantando proyectos que favorecen a su comunidad. Esto se puede ver con los talleres gratuitos que se adelantan, ayudando al progreso e incentivar a los habitantes para desarrollar distintas habilidades artísticas. También encontramos que estas entidades locales se están ocupando para mejorar la movilidad y motivar a las personas a usar un transporte ecológico y saludable, construyendo nuevas bicicarriles que los comunicaran con distintas localidades.
La localidad de Usme juega al reto de mezclar una actividad como la de los grafiteros con el medio ambiente. Reto que resulta difícil sí tenemos en cuenta las posiciones extremas que existen sobre esta expresión “cultural”, pues mientras algunos consideran el graffiti como una actividad propia de delincuentes, otros la califican de fenómeno cultural de los últimos tiempos. De todas maneras lo cierto es que tienen que ver con el ambiente visual de la ciudad independientemente de quienes lo apoyan o lo atacan.
La localidad de Chapinero al encontrar entre su zona de influencia territorios que constituyen el pulmón de la ciudad vela por realizar actividades de protección al medio ambiente en una concertación entre las autoridades y los habitantes. Esa concertación resulta más activa en la medida en que no solo se buscan tareas de prevención, sino que llega al punto de evitar que se llegue a realizar actividades que posiblemente han sido autorizadas por las curadurías urbanas, como es la construcción de edificios en la zona; acción que a simple vista se vería de poca influencia en el medio ambiente, pero que adquiere relevancia en la medida en que con un edificio llega otro y tiende a desaparecer el ecosistema y por ende se destruye el pulmón de la ciudad.

Referencias

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